Roscos de la abuela

Los roscos de la abuela son un clásico que evoca tradición y sabor. Con una masa suave y crujiente, estas delicias son perfectas para disfrutar en cualquier momento. Una receta que pasa de generación en generación, conquistando paladares con su irresistible aroma y sabor inigualable.

Los Roscos de la abuela son una delicia que nos transporta a la infancia con cada bocado.

Transmiten el cuidado y amor de las generaciones pasadas en cada detalle de su preparación.

Su sabor dulce y fragante nos invita a disfrutar de momentos simples y reconfortantes en compañía de quienes amamos.

Roscos de la abuela

Repostería
1 hora
6 Porciones

Ingredientes

3 cucharas de Soperas de azúcar

3 cucharas de Soperas de aceite de girasol

3 cucharas de Soperas de anís dulce

3 cucharas de Soperas de leche

1 Huevo

1 Limón

200 gramos de Harina

1 taza de Aceite de girasol para freír

Azúcar

Preparación

Paso 1 : Para preparar los roscos fritos, primero se bate el huevo con el azúcar.

Paso 2 : Luego, se incorpora el aceite y el anís.

Paso 3 : Una vez que se forma una pasta blanquecina, se añade la ralladura de limón y la leche.

Paso 4 : En este momento se agrega la harina poco a poco, procurando que la consistencia sea más bien pegajosa.

Paso 5 : A continuación, se calienta el aceite en una olla.

Paso 6 : Se untan las manos con aceite y se moldean los roscos dándoles forma de círculo con un agujero en el centro.

Paso 7 : Se fríen los roscos hasta que se doren por ambos lados, se secan con papel de cocina y sin dejar que se enfríen, se rebozan con azúcar.

Paso 8 : Los roscos fritos se sirven tibios o fríos.